He comprado este juguete con algo de miedo para mi gatete, pues ya se sabe lo peculiares que son para los juguetes y/o cosas nuevas. Pues, una vez montado, enseguida le picó la curiosidad y moviendo un poquito las pelotas en los railes, ya estaba jugando con ello.
Es como una especie de pirámide cónica con varios pisos, en cada piso hay un carril circular son una bola. Cada piso tiene una pelota de distinto color, incluso hay una que según la enpuja el gato da destellos luminosos. En la parte de arriba tambien lleva un muñeco de un ratón unido con un muelle a la estructura para completar la diversión.
El gato se entretiene mucho golpeando y persiguiendo las pelotas, para él es todo un desafío. Compra totalmente recomendable.