Todo un invento en la limpieza de los desagues. Se acabaron los químicos que además de nocivos no hacían prácticamente nada. Te evitas así desmontar sifones, una tarea laboriosa y desagradecida. La primera vez que lo usas, que es cuando ha acumulado restos, es toda una gozada, jajaja.
Es flexible como para entrar en el sifón, pero no esperes que penetre de sifón a la tubería bajante. Mide unos 45cm, de los cuales 35cm son de cepillo. No hace falta más longitud para el tramo que en realidad pretende limpiar.
Tras su uso un consejo: da el agua poco a poco y fíjate no hayas separado el sifón de la tubería, como me pasó a mi en uno de los desagues. Si es que soy más bruto... :O Luego ya le das el agua a chorro y como los chorros del oro!!!
Aún con todo no deja de ser un cepillo y su precio podría ajustarse más, de ahí que no le de las 5 estrellas que merece como producto.