En la antigua ordenanza generalmente de Seguridad e higiene en el trabajo, se fijaban como condiciones óptimas de trabajo respecto a la temperatura y humedad interior de trabajo, las de una humedad relativa entre el 40 y el 60 por ciento, y una temperatura entre los 20 y 22 grados centígrados. Con estos medidores, podemos controlar la humedad y temperatura interior de cada una de las estancias de nuestra casa para poder mantener unas condiciones óptimas de habitabilidad. Imprescindible!