Hoy tengo la oportunidad de probar los auriculares deportivos de POWERADD, de los que me atrajo inicialmente, antes de la compra, el diseño de los pinganillos, terminados en un rombo, con apariencia de buena calidad y con el nombre de la marca en medio.
A su llegada, vienen empaquetados en una caja de color cartón, que en principio no transmite mucha sensación premium, aunque suele ser un tipo de formato bastante común en productos asiáticos.
Cuando abrimos esa pequeña caja, podemos ver que el envío es generoso, ya que nos incorpora los própios auriculares, una bolsa llena de recambios para los auriculares (diferentes tamaños de botones y esas pequeñas gomas que fijan el auricular al interior de oido evitando que se caigan. También un pequeño cable de carga micro USB.
Los auriculares, si tienen aspecto PREMIUM, tanto por su estética, como por los materiales con los que están construidos.
Quizás la pieza en forma de rombo, y que queda fuera del oido es un poco grande para mi gusto, pero está muy bien construida, con los bordes rebajados en metal, tiene un aspecto elegante y robusto. El cable que une los dos auriculares, es plano, un buen detalle que ayuda a resaltar la calidad del conjunto.
También acorde con todo el conjunto, el mando a distancia y punto de carga, que tiene una estética muy agradable, ligero porque esta hecho en plástico, pero con sensación de calidad.
Finalmente, y en cuanto a su uso, y lo más importante, estos auriculares tienen un tono general donde potencia los bajos, con una profundidad en ese extremo remarcable. Medios y altos muy correctos hacen de este par de auriculares una estupenda opción para escuchar música, sea haciendo deporte o manteniéndonos estáticos y dedicados al disfrute de la misma. Creo que son una excelente opción a un precio muy competitivo.
Su ergonomía no tiene ningún pero, son cómodos, al momento ni te enteras que los llevas puestos y no molestan al andar por hacer vacío, mientras que al mismo tiempo al ser in ear, aislan mucho del entorno próximo.